Los implantes dentales son la alternativa de primer orden en la reposición de uno o varios dientes, ya sea por pérdida o ausencia temprana. En general, podríamos hablar de los implantes dentales como raíces artificiales. Sí te estáis preguntando de qué material están hecho los implantes dentales, la respuesta es que una gran mayoría de estos están compuestos de titanio, fundamentalmente por la alta biocompatibilidad que presenta el elemento, dando lugar a una unión física y química total con el material óseo y el resto de los tejidos de la boca, en un proceso denominado osteointegración. Conoce a continuación todo lo que necesitas saber sobre implantes dentales, ventajas, tiempo de duración del proceso según los tipos de implante, etc.
El tiempo de duración de una intervención quirúrgica en un tratamiento de implantología va desde 30 a 45 minutos hasta unas tres horas, el factor determinante viene dado por la cantidad de piezas dentales que se deban ser colocadas.
Posteriormente, sobre cada implante se colocará una corona, la cual cumple con una función y forma de un diente natural. Al ser esta un componente estético a modo de prótesis superficial, es necesario tener en cuenta que, para realizar la implantación, ha tenido que existir un previo diagnóstico conocido como la fase inicial de estudio y planificación; que guiará minuciosamente el tratamiento a partir de factores intermedios que puedan presentarse en sus resultados, como lo es la condición del hueso. Hay quienes se preguntan qué tipos de implantes dentales existen y bajo qué condiciones se aplica uno u otro tratamiento. A continuación damos respuesta a esa interrogante:
Osteointegración en función de la condición y pérdida ósea
El proceso de osteointegración presenta variaciones no solo por la cantidad de dientes perdidos, sino también por las cualidades del perfil dental del individuo, interviniendo directamente las de carácter negativo como el cambio de mordida por el desplazamiento de los dientes, el desgaste excesivo por fricción y desplazamiento y la pérdida ósea; siendo esta última predominante en los intervalos de tiempo en el momento de dar cabida a un tratamiento de implantología.
Es importante considerar la cantidad de material óseo disponible, o en el más desafortunado de los casos, la ausencia del mismo. Es pertinente concluir de lo anterior que entre la cantidad de material disponible y la osteointegración existe una razón del tipo uno a uno, por lo que el diagnóstico previo y el tratamiento se relacionan de manera directamente proporcional, es decir, a más pérdida ósea, más largo será el proceso.
Tratamiento de implantología en condiciones óptimas
Se habla de condiciones óptimas cuando en la fase inicial de estudio el diagnóstico arroja un resultado negativo en la reabsorción del hueso, lo que permite proceder a la implantación con debida normalidad.
Al ser colocado el implante comenzará el proceso de osteointegración que equivaldrá a unos 3 meses hasta que se consolide en una unidad ósea estable y fiable.
Pasados los 3 meses se procede a la inserción de un pilar transepitelial o de cicatrización en una segunda intervención quirúrgica. Es importante saber que este componente permite la unión entre el implante y la corona garantizando una fijación óptima de la prótesis dental. También, a este plazo establecido se toman impresiones a partir de bases de silicona (método tradicional) o a través de método de scanning intraoral en 3 dimensiones, con el único fin de corroborar el avance del tratamiento y/o dar registros geométricos de la forma final de la corona que será implementada. Una vez se haya corroborado el éxito del tratamiento, podréis preguntarle a tu dentista cuales son las ventajas cepillo eléctrico vs manual para dar limpieza a tu implante.
Tratamiento de implantología con indicios de reabsorción del hueso
El proceso de cicatrización presenta una disminución del volumen en la anchura del hueso al ocurrir la pérdida o extracción de una pieza dentaria. Unido a esto, si el área afectada converge también en una pérdida de función; el déficit de tejido óseo será considerable.
No se debe descartar que las enfermedades radicadas en las encías conocidas como periodontales asumen de igual manera un rol degenerativo en los tejidos, si bien no es de carácter súbito, éstas parten desde la pérdida de los tejidos blandos hasta comprometer directamente al hueso.
El tiempo de tratamiento sugiere un incremento ya que al estar presente este déficit es necesario realizar un injerto de hueso en la zona afectada, con la finalidad de aportar materia ósea suficiente para que la osteointegración se desarrolle normalmente.
El implantólogo procede a la colocación del componente principal en el área de hueso natural y se añade el hueso artificial a modo de cemento, la consolidación de ambas sustancias sucede en un plazo estimado de 3 meses, de preámbulo debe respetarse este proceso y seguidamente dar libre continuidad hasta que el tratamiento finalice en su plazo establecido, en conclusión: desde la inserción de hueso hasta la colocación de la corona llevará un total de 6 meses. Otra opción es que puedas evaluar tu elección y considerar que se adapta mejor a ti y a tu caso, si los implantes o puentes dentales.
Tratamiento de implantología sin la existencia de hueso
Este cuadro presenta la ausencia total de volumen óseo en el área deseada para la implantación, comúnmente observado en casos de enfermedad periodontal avanzada, traumatismos múltiples en tejidos bucales y malformaciones en el radio exterior del paladar.
El tratamiento convencional de implantología se ve mermado al no haber un cimiento donde colocar todos los componentes, de igual manera al caso anterior debe realizarse un injerto de hueso, tomando en cuenta esta vez que la masa adicional ocupará el espacio restante de todo un arreglo dental, es decir, se elevará el seno maxilar a un nivel estandarizado por las dimensiones de la encía. Al ser este un proceso donde el material óseo es netamente artificial, la duración total del tratamiento ascenderá a los 9 meses, en una primera etapa de 3 meses que comprende la inserción del hueso y su cicatrización, 3 meses de una segunda intervención quirúrgica para la colocación del implante y finalmente el proceso de osteointegración y ajuste de la corona.
Tratamiento de implantología de carga inmediata
Consiste en colocar todo el arreglo de una o varias piezas dentarias justo después de realizar la implantación, sin pasar por el proceso de osteointegración. Lo que diferencia este proceso de los demás es que no transcurren meses entre la colocación de todos los componentes y que estos, que son del tipo provisional también cumplen con un rol en la masticación, sin embargo, la solidez de este proceso no está garantizada y un mal mantenimiento podría degenerar en el desplazamiento del implante o en infecciones a nivel de la encía.
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